viernes, 13 de noviembre de 2009

TENGO UN RATON EN MI COCINA

Tengo un ratón emigrante en mi cocina, o dos, o vaya usted a saber cuantos...Se han trasladado sin mi permiso, en un descuido de la aduana. Tenía yo el paso fronterizo libre y abierto porque estaban pintándome la planta baja de mi casa y quería que se secase rapidamente... Y parece ser que como hacía frío en la calle, y mi casa aparentaba ser calentita, cómoda y con comida, se han mudado, cual si fueran okupas sin permiso.
Y he descubierto un par de cosillas de mi misma gracias, o a raíz de, la entrada de este intruso.
Una de ellas no me sorprende en absoluto: !Odio a los roedores! En realidad el animalico debe ser minúsculo, según me ha dicho quien lo ha visto, así como para caber en un rinconcito cualquiera, en la mesa de la cocina, bajo el frigorífico. Con un poco de alimento le bastaría, eso y un nidito caliente que se ha hecho el amigo con parte de una colchoneta que yo no usaba y el ha aprovechado muy bien. No, no es que le tenga miedo..Es mas bien una sensación de asco, repugnancia..Y de orgullo personal.. Joder, que el sitio del bicho es el campo y mi casa es MI CASA, no SU CASA.. y lo quiero fuera, lo mas rápidamente posible.
Lo segundo que he descubierto, y que enlaza por tanto con lo anterior, es que soy niña de asfalto. Osea, que el campo para otros, que no para mi.
Y lo tercero que he descubierto es que soy tan gata como un pulpo con rabo. Vamos, que llevo una semana de sobresalto en sobresalto cada vez que oigo el más mínimo ruido pensando que va a salir en cualquier momento de estampida.. Y claro, saldrá el ratón por un lado y yo por otro, of course.(esto último que no salga de entre nosotros pues mi credibilidad se iría al garete..ok?)

Ah.. y lo último que he descubierto y eso si que es chungo, es que los gatos, los gatos zampones, bien criados y lustrosos no cazan ratones.. No señor ! Tengo seis.. SEIS gatos, quiero decir. Ayer, como por casualidad metí a la Bruja de Halloween a la cocina a ver si la señorita tenía a bien hacerme el favor y parlamentar con el ratón. Se puso muy nerviosa, histérica perdida, como estaba yo misma, iba de un lado a otro maullando y me miraba como diciéndome: ¿pero se puede saber porque me has metido aquí y que quieres que haga? Tras media hora decidimos irnos las dos
. He llegado a la conclusión que no es lo mismo comerse un pincho de mosca voladora, que tener que trabajar para sacarse la comida de debajo de un armario, sobre todo si el inquilino no está por la labor de sacar los bigotes al aire.

Enfin.. he comprado trampas, a ver si cuelan.. Les seguiré informando. Y si oyen un grito hipohuracanado cerca, es que ya nos hemos visto las caras el okupa y yo, y hemos decidido su desalojo por órden dictatorial.
Atentamente: LA RUSKA

1 comentario:

  1. CON FECHA 13/Noviembre PAQUIM ME CONTESTO POR CORREO ELECTRONICO:

    francisco paquim
    para usuario
    13/11/09

    Yo no soy un ratón, pero de todas formas sabes que te quiero un montón.....

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